Ruta con mucho sabor por la provincia de Castellón

Además de sus reconocidos destinos de sol y playa (Peñíscola, Benicasim, Alcocéber, Oropesa, Benicarló…), la provincia de Castellón, de la mano de Castelló Ruta de Sabor nos propone un viaje hacia su interior. Un recorrido hacia sus orígenes, junto a sus gentes, descubriendo paisajes y pueblos sorprendentes. Nos encontramos ante un singular y muy plural entorno en el que coexisten el mar, sus pueblos costeros y sus extensas playas junto con un panorama de interior de llanuras, montañas y fértiles valles.

En este plural enclave geográfico, favorecido por su clima excepcional y amable, la naturaleza ha sido especialmente generosa. Esta particularidad unida al trabajo, dedicación y estilo de vida mediterráneo de sus gentes ha propiciado que Castellón haya sido considerada como la alacena del Mediterráneo.

Entorno a este paisaje de olivos milenarios, almendros, naranjos, cerezos, algarrobos y viñedos, los castellonenses han sabido trabajar estos productos hasta conseguir dar con esa oferta gastronómica tan rica, variada y saludable, esencia de la dieta mediterránea, que no en vano ha sido declarada Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.

Este arraigado estilo de vida y la dedicación en favor de una alimentación rica y saludable son las señas de identidad de una cultura que propicia la interacción social, el respeto hacia la tierra y la biodiversidad, y la conservación de actividades tradicionales y artesanales vinculadas a la agricultura, a la ganadería y a la pesca.

¿Te lo vas a perder?

Castelló Ruta de Sabor reúne más de trescientas marcas en favor de la promoción turística y gastronómica de excelencia englobada en sus distintas categorías: restaurantes, alojamientos, guías turísticos, productores, bodegas, distintas instituciones, ayuntamientos, agencias de viajes y otras empresas vinculadas con el sector. En definitiva, una amplia propuesta para disfrutar y degustar su gastronomía de costa y en las zonas de interior, de sus frutas y verduras, de los dulces, las bodegas y de sus aguas.

Yantar y pernoctar

La provincia, bien puede presumir de sus excelentes restaurantes y diversidad de alojamientos; tanto de hoteles, establecimientos de turismo rural, campings, etcétera; además de otros comercios gastronómicos, de sus industrias, mercados y productores.

Concretamente, en Alcocéber, también conocido como Alcocebre o Alcossebre, uno de los destinos de costa más visitados de la provincia, se encuentra el restaurante Atalaya, un hito indiscutible y acertadamente reconocido por su estrella Michelin y Sol de la Guía Repsol. Alejandra Herrador y Emanuel Carlucci, en los bajos del edificio de apartamentos Mar del Plata, cercano al puerto deportivo, regentan tan exquisito local, tanto por su oferta gastronómica como por minimalista decoración. No obstante, lo más sorprendente se percibe en el momento justo de la degustación con los omnipresentes sabores de la huerta, la montaña y la costa del Bajo Maestrazgo tratados con relativa sencillez, pero que, a la vez, dejan evidente su espíritu atrevido y creativo de estos dos discípulos del grande Martín Berasategui.

De pernoctar a la vez que buen yantar, la provincia brinda una relación bien extensa. El Hotel Luz con su restaurante aQua, en la misma ciudad de Castellón de la Plana; y en el interior, Pou de Beca en la localidad Vall d’Alba, perteneciente a la comarca Plana Alta castellonense, son dos buenos referentes de la oferta de restauración adherida a Castelló Ruta de Sabor.

Por su parte, las mesas del aQua exponen una propuesta gastronómica de vanguardia basada en la tradición mediterránea prestando especial esmero en la elaboración de alimentos naturales y sostenibles, un exquisito recorrido por los sabores mediterráneos, costumbres, ingredientes y su espíritu intercultural.

También alojamiento rural y restaurante, el Pou de Beca hace referencias a los productos de temporada, proximidad y Km. 0, como ellos mismos describen, elaborados con el mayor cuidado por las materias primas. Desde este templo culinario también realizan cursos de cocina, talleres y actividades gastronómicas, así como visitas a productores locales y degustaciones de productos.

Más olores y sabores

No deja duda que tan atractiva oferta gastronómica sea del todo dependiente de sus orígenes, de sus productores, de sus gentes… Así, la Quesería Tot de Poble se suma a esta relación haciendo valer sus derivados de la leche. Ubicada en el pequeño pueblo de Les Coves de Vinromà (Cuevas de Vinromá), en el interior de la provincia de Castellón. Aquí, con aprendizaje, esfuerzo, mucha pasión y dedicación la pareja Oscar y Mayte elaboran distintos productos entre los que destacan sobremanera sus semi-curados de dos meses, curados de seis meses y el añejo de nueve meses, queso de leche cruda de cinco meses, de hierbas aromatizadas y un queso azul con su inimitable rúbrica.

Y qué mejor maridaje son estos quesos que saborear con un buen vino. Y es que en esta porción mediterránea también pueden alardear de sus viñedos y bodegas. Son un total de dieciséis bodegas incluidas en la selección de Castelló Ruta de Sabor. De entre ellas, algunas ofrecen a los visitantes la posibilidad de ser visitadas, así como la degustación y catas dirigidas de lo más recomendables.

Tal es el caso de la Bodega Mas de Rander, en una zona montañosa de interior, en el término de Torreblanca, que continúa contemplando las premisas de una agricultura sostenible y ecológica, totalmente integrada en el entorno y cubierta con un manto de vegetación que aprovecha el agua de la lluvia y las corrientes de aire con la finalidad de mantener constante la temperatura de sus vinos.

También la Bodega Barón d’Alba brinda la posibilidad de conocer in situ los proceso de cultivo, vendimia y maduración de sus vinos; un recorrido para comprender cómo se elaboran los diferentes vinos Clos d’Esgarracordes. Una cata de vinos será perfecta para aprender a valorar estos excelentes caldos.

Y otra que merece ser destacada es la Bodega Vicente Flors. Su propietario, Vicente Flors Martí, enamorado de los campos castellonenses ha puesto todo su empeño e ilusión por mantener viva la tradición vitivinícola de Les Useres, implicándose personalmente en todos los procesos de elaboración del vino. La vendimia se realiza a mano y la maceración en frío. La primera producción del vino Clotàs ha sido con la variedad tempranillo. En la añada del 2008, se sigue con el vino tempranillo 100% y también con el acertado ensamblaje de vino tempranillo y cabernet sauvignon.

Como colofón, tras la visita a estas últimas viñas, se hace del todo imprescindible un paseo por la cercana Villafamés, localidad de interés histórico artístico a escasos 12 km de distancia. Resulta muy atractivo deambular por su casco antiguo, en la parte alta, alrededor de su castillo medieval, donde se encuentran los principales palacios y casonas señoriales. Aunque, no en vano, el punto más visitado de Villafamés es su Museo de Arte Contemporáneo Vicente Aguilera Cemi, ubicado en el palacio gótico del Batle, en el que se exhiben obras de artistas de finales del XX de la envergadura de Miró, Chillida, Canogar, Gargallo, Equipo Crónica, Eusebio Sempere, etcétera. También sus destacados otros monumentos como su iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, de finales del XVI, y la ermita de la Sangre, a los pies de su castillo.

De tradición marinera

No obstante, por su vinculación con el Mediterráneo, el sector con el que se asocia comúnmente a Castellón es por los productos del mar. Pesca-turismo El Paraíso, en El Grao de Castellón, ofrecen la posibilidad de vivir en persona estas tradiciones, saliendo a pescar con los auténticos protagonistas de la mar para conocer estas artes de pesca, disfrutando de amaneceres espectaculares y completando con la degustación del típico rancho de pescados y mariscos recién capturados. Sin duda, una última experiencia que no dejará de sorprender, en torno a las tradiciones, olores y sabores de la provincia de Castellón.